viernes, 5 de agosto de 2011

CUIDA TU CUERPO.!

Hacer del cuerpo el centro de la vida distorsiona el sentido de la misma y  dista mucho de la sabia voluntad de Dios. Pero descuidar nuestro organismo, tampoco es saludable. 
La Biblia relata que Dios creó al ser humano, hombre y mujer, y los puso como administradores de la creación. Esto muestra que es el deseo de Dios que cuidemos lo que ha creado, incluyendo el cuerpo y el alma que nos ha dado. El cuidado del alma nos permite aceptarnos como somos. Y esto que es posible gracias al perdón y amor que Dios nos ofrece en Jesucristo. El cuidado del cuerpo nos permite transitar mejor la vida en este mundo. Lo que necesitamos y Dios espera de nosotros, es un equilibrio que nos permita gozar de la totalidad de nuestro ser.
1. Realizar ejercicios
Realizar alguna forma de ejercicio es un elemento básico en la vida de toda persona. Se ha determinado que el ejercicio reduce los síntomas de la depresión, mejora la autoestima, desarrolla las habilidades mentales, y reduce la ansiedad, así como las respuestas fisiológicas estresantes. Si está interesada en obtener una buena salud integral, planifique por lo menos quince a veinte minutos de actividad física moderada diariamente. En nuestros días está de moda trotar o ir al gimnasio, pero caminar es quizás lo más práctico. Encuentre su propio ritmo. Empiece con pasos cómodos hasta llegar a una caminata rápida de veinte minutos, tres o cuatro veces a la semana. El ejercicio  aeróbico moderado también es beneficioso y añade el placer de hacerlo en grupo. Todo ejercicio se debe combinar con una manera correcta de respirar: Use el abdomen, mantenga la boca cerrada e inhale por la nariz.
Recuerde: una salud óptima es el resultado de factores tanto físicos como mentales.
ALCANCE OBJETIVOS
- Hacer ejercicio durante veinte minutos por lo menos tres días a la semana.
- Comer conscientemente.
- Ore a diario. Le ayudará a profundizar el sentimiento de paz  interior.
2. Comer sano
A menos que el médico haya prescrito una dieta especial, la mayoría de las personas pueden seguir estas pautas en su dieta.
- Coma pocas grasas. Éstas agregan muchas calorías y aumentan el riesgo de contraer enfermedades cardíacas y muchas formas de cáncer. Reduzca el consumo de carnes grasosas, pasteles, quesos y productos lácteos enteros.
- Ingiera poca o ninguna cafeína.
- Consuma poco azúcar. Éste libera insulina y aumenta el apetito, incrementando así el hábito de comer compulsivamente.
- Consuma frutas frescas, verduras y cereales enteros en abundancia. Son fuente de vitaminas y disminuyen los niveles de colesterol. Además, incrementan la evacuación de residuos de comida a través del tracto digestivo.
Es posible caer en una preocupación exagerada por la propia figura, la moda y su apariencia física. Es fácil dejarse atrapar por un deseo desmedido por tener un cuerpo “sexy” y vestirse con lo último de la moda. ¿No cree que existe una mejor forma de gastar su tiempo, su energía y su dinero que afanarse por estar a la moda?  Recuerde: La verdadera belleza está en el interior de su persona, donde resplandece la bondad, la humildad, la paciencia y el amor. Estas cualidades le ayudarán a ser una mujer realizada.

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